19/4/16

Curso: Acompañar vidas adolescentes que se complican

Los días 4 y 5 de mayo celebraremos el curso "Acompañar vidas adolescentes que se complican", con Jaume Funes y Jordi Bernabéu. A partir del análisis de tres casos tan complejos como habituales (consumo de drogas, "enganche" a las pantallas y acoso entre iguales), los ponentes nos invitarán a la reflexión y el debate.

Con esta formación perseguimos:

  • Construir un abordaje positivamente activo sobre algunas expresiones de dificultad en las adolescencias actuales.
  • Definir formas de atención que no partan de las alarmas que los adultos hemos definido hasta ahora.
  • Adecuar el acompañamiento que realizamos los profesionales a las nuevas expresiones de dificultad o a las nuevas incertidumbres educativas.

Para ello en la formación, Jaume Funes y Jordi Bernabéu, trabajarán sobre los siguientes contenidos:

  • ¿Qué debemos saber sobre los adolescentes hoy?
  • Aclaremos qué significa -para ellos y ellas y para nosotros- complicarse la vida en plena adolescencia.
  • Nuevas y viejas complicaciones de la salud mental adolescente.
  • La vida de Alicia. Parece que no hay vida sin una pantalla por delante: Empecemos a ayudar. Consensuemos dónde están para unos y otros los problemas. ¿Existe un adolescente que sólo y principalmente tenga problemas "digitales"? Aprender a moverse en la virtualidad. El acompañamiento presencial y múltiple y el acompañamiento virtual. 
  • La vida de Álex "Es absurdo vivir sobrio". Ser adolescente y contar con la "maravilla" del alcohol y la "bondad" de la maría. Las complicaciones vitales que se complican más con algunos usos de drogas. Acompañar en la gestión de riesgos y en el aprendizaje de las conductas protectoras.
  • La vida de Marcos, "me sobran los otros".: Ser adolescente ¿en compañía de quién? Confrontarse, afirmarse, relacionarse, convivir...sentidos adolescentes. Gestionar rabias, comprender las diferencias y aliarse entre iguales para vivir. El acompañamiento como mediación y explicación de la comunidad. 

El curso se celebrará en el Centro Joaquín Roncal. Día 4 de mayo de 10 a 14 horas y de 17 a 20 horas. Día 5 de mayo de 10 a 14 horas. Puedes inscribirte en jornadas@fundaciondelmenor.org





Una p

28/3/16

La denuncia como recurso a la violencia filio parental


En el último número del Boletín de Violencia Intrafamiliar que publicamos en la Fundación para la Atención Integral del Menor, el Doctor en Derecho Penal, Alfredo Abadías, nos ofrece su visión de la violencia filioparental desde la perspectiva penal, aclarando conceptos y desglosando las consecuencias que la denuncia puede tener para el menor.

En opinión de Abadías, la denuncia de los padres hacia los hijos, debería ser el último recurso pero al mismo tiempo, considera que es necesario como inicio de un camino de reparación, ya que los progenitores llegan a este momento tras episodios de sufrimiento en los que incluso su integridad física puede ser comprometida. También son los hijos o hijas con esas conductas violentas quienes sufren, como manifiestan Miguel Ausejo y Raúl Gutierrez, profesionales del Espacio Ariadna en este artículo




Algunos de los aspectos clave que nos explica Alfredo Abadías son:

  • El expediente contra un menor puede iniciarse  por la denuncia de los padres o de oficio si, por ejemplo, la policía detecta signos evidentes de violencia.
  • Interpuesta la denuncia, un equipo técnico de la fiscalía evalúa la situación, teniendo en cuenta "el entorno en el que se está desarrollando el menor a nivel familiar, educativo, laboral y social". Este equipo técnico puede mediar para buscar una solución reparadora, o informar a favor de la conveniencia de una medida penal". 
  • Es importante que los padres valoren si se acogen o no al derecho a no declarar, algo habitual pero que tiene consecuencias, ya que si el hijo o hija vuelve a casa se pueden repetir la situación previa a la denuncia.
  • La medida judicial impuesta contemplará siempre un programa de tratamiento individualizado que trabaje de forma específica la problemática de la violencia filioparental. 



11/2/16

II Boletín del Observatorio de Violencia Intrafamiliar

Publicamos el II Boletín del Observatorio de ViolenciaIntrafamiliar, un trabajo que recoge algunas de las ideas de las reuniones del Observatorio de Violencia Intrafamiliar y la experiencia de los expertos en esta problemática.




En este número hacemos un repaso de la IV reunión del Observatorio, que contó con la participación del psicólogo Alberto Rodríguez, entrevistamos al educador y periodista, Jaume Funes, y analizamos las implicaciones penales de las denuncias a los hijos en los casos de violencia filioparental, con la colaboración del doctor en derecho penal, Alfredo Abadías. Además, os ofrecemos una selección de recursos con los que podemos profundizar o trabajar diferentes aspectos de la educación emocional.

En el II Boletín del Observatorio ha participado la diseñadora Marta Boza con unas imágenes que definen con gran sensibilidad las emociones que están detrás de la violencia y de las dificultades que entraña.

Esperamos que la lectura sea de vuestro interés : )




25/1/16

Educlando, un proyecto para prevenir la violencia desde las aulas

La creciente preocupación de la Fundación para la Atención Integral del Menor por los fenómenos de violencia en la infancia y la adolescencia nos llevó, hace dos años, a crear el Espacio Ariadna, un programa que desarrolla diferentes líneas de trabajo con la adolescencia y las familias y que se ha ampliado con el trabajo del proyecto EDUCLANDO en los centros educativos.

 Con esta iniciativa queremos contribuir a la prevención de la violencia como forma de expresión de adolescentes y jóvenes desde las aulas, el lugar en el que los jóvenes se relacionan, y de una forma integral; trabajando con las familias, el alumnado y el profesorado.







Este programa de prevención aborda las diferentes expresiones de violencia con más prevalencia en los dos ciclos de la E.S.O.: violencia entre iguales, en el núcleo familiar, y en la pareja. En FAIM compartimos las teorías que afirman que, detrás de esta violencia, no están sólo los hechos concretos que la ponen de manifiesto sino que también hay emociones y valores que los jóvenes pueden aprender a identificar y a expresar de una forma adecuada y no violenta.

 Con el proyecto EDUCLANDO queremos desarrollar las competencias emocionales de los adolescentes como la autogestión, las habilidades de vida y bienestar, la conciencia emocional o la autoestima. Si con esto, logramos que identifiquen los valores de respeto mutuo, empatía y no violencia, podremos prevenir el acoso, la violencia de género, la violencia hacia en el entorno familiar e incluso la violencia contra si mismos.

 La educación emocional ya está integrada en las actuaciones del profesorado y con proyectos específicos del Gobierno de Aragón y otras organizaciones.  EDUCLANDO aporta una mirada diferente, sobre todo desde el punto de vista de los chicos y chicas ya que no ven a los profesionales que participan en el programa como adultos que evalúan o que ejercen su autoridad sobre ellos. De esta forma, contribuimos a la educación emocional como herramienta de “anclaje”, como un trabajo que refuerza el papel del profesorado y de las familias.
Los objetivos específicos que perseguimos con el alumnado son:
- Promover la reflexión sobre los cambios que se dan en la adolescencia. 

- Aprender a manejar sus propias emociones e identificar las ajenas para facilitar la 
       comunicación y evitar la aparición de problemas en las relaciones. 
- Mostrar que hay diversas figuras adultas (profesionales) dispuestas a escuchar sus 
dudas o problemas. 

 
Estos objetivos pueden alcanzarse con un plan de acción desarrollado a lo largo de los años. En los centros educativos en los que hemos puesto en marcha la iniciativa, el programa está en su primera fase en la que se celebran diferentes sesiones: 
  • Una sesión previa con el profesorado en la que se compartirán inquietudes y vivencias con las problemáticas actuales y los profesionales de FAIM expondrán su experiencia  desde la intervención socioeducativa y terapéutica.

  • Dos sesiones con el alumnado, una para conocer y reconocer las emociones y otra para trabajar en alternativas a ese modo de “comunicación-relación” que es la violencia.

  • Dos sesiones con las familias en las que se tratan los cambios de la adolescencia y, en especial, las conductas de riesgo de los chicos y chicas en esta época, y las soluciones a estas conductas como el establecimiento de las conductas positivas o de límites y normas.
 Al finalizar las sesiones se realiza una encuesta para evaluar si se han logrado los objetivos alcanzados.

 Con el programa EDUCLANDO queremos incidir en la atención primaria desde nuestra experiencia con los casos de violencia agravados que atendemos en FAIM. Cuando se trabaja la prevención en una comunidad como la educativa, podemos llegar de forma rápida a las dos partes identificadas en un acto violento: agresor y víctima y a los sujetos pasivos, las personas que contemplan estas situaciones y no intervienen para solucionarlas.

Si quieres más información sobre el programa, puedes ponerte en contacto con nosotros en espacioariadna@fundaciondelmenor.org

4/1/16

FAIM acredita su Sistema de Gestión Ética y Socialmente Responsable con la Norma SG21_2008

La Fundación para la Atención Integral del Menor (FAIM) cuenta con el certificado que acredita que su Sistema de Gestión Ética y Socialmente Responsable está de acuerdo a la Norma SGE21:2008, ratificado por el Comité de Certificación de Forética el pasado mes de octubre. De esta forma, FAIM se convierte en una de las primeras entidades aragonesas que puede acreditar la gestión socialmente responsable con la que trabajamos en el día a día. 

Esta es una buena noticia para todas las personas que trabajamos en FAIM porque supone la validación a nuestro compromiso con la transparencia, la integridad y la sostenibilidad social, medioambiental y económica.

Pero, ¿qué significa contar con un Sistema de Gestión Ética Socialmente Responsable? Significa que FAIM lleva este compromiso a todas sus relaciones: con los menores a quienes atendemos y sus familias, con las personas que integran la Fundación, con los proveedores y las administraciones públicas, con el patronato y nuestros colaboradores y otras organizaciones sociales. Además llevamos estas prácticas a nuestro entorno social y ambiental. Le corresponde a la dirección de la Fundación la tarea de establecer los procedimientos que permitan mantener y mejorar la gestión ética, así como la creación de los indicadores con los que evaluaremos el cumplimiento constante de la Norma SG21: 2008

Las medidas concretas con las que cumplimos con este sistema de gestión son numerosas y están alineadas con los objetivos y valores de la Fundación. Nuestra misión es proporcionar a los jóvenes y menores que lo precisen, un entorno estructurado, seguro, protector, educativo y terapéutico en el que dar respuesta a sus necesidades, a cada uno en función de su desarrollo evolutivo.

Esta respuesta se desarrolla en torno a unos valores a lo que damos garantía de cumplimiento con el Sistema de Gestión Ética y Socialmente Responsable. Estos valores son la atención personalizada, la motivación, el trabajo en equipo, la responsabilidad, la eficacia, el respeto y la tolerancia, la adaptación al cambio , la creatividad y la capacidad de aprendizaje, el compromiso y la transparencia y un compromiso en la lucha contra el cambio climático.


Sello de acreditación de cumplimiento de la norma SG21


En concreto y como ejemplos del desarrollo del Sistema de Gestión Ética y Socialmente responsable, hemos creado en Comité Ético y un procedimiento de resolución de conflictos éticos, apostamos por la formación continua y la supervisión grupal del trabajo de las personas que formamos parte de FAIM o publicamos las memorias anuales de actividad, entre otras.


FAIM quiere ser una entidad de referencia en la prestación de servicios que mejoren la calidad de vida de los menores que se encuentran bajo medidas judiciales, medidas de protección o en situación de fragilidad, con el consiguiente riesgo de exclusión social. Nuestro Sistema de Gestión Ética y Socialmente Responsable está encaminado a lograrlo  y supone una manifestación de nuestro compromiso con los menores. 

10/12/15

Las dificultades de las familias adoptantes en el Observatorio de Violencia Intrafamiliar

El Observatorio de Violencia Intrafamiliar ha dado un paso más en la búsqueda de respuestas a las problemáticas que tienen que ver con la violencia intrafamiliar. En su última reunión, profundizó en el perfil de los chicos y chicas adoptados y en las situaciones específicas se que producen en la familias adoptantes.

El psicólogo y coordinador del área de acogimiento y adopción de Agintzari, Alberto Rodríguez, ofreció a los participantes su experiencia con una charla abierta cuyo título, “Comprendiendo al adolescente adoptado: las conductas de riesgo como estrategias de búsqueda de seguridad”, resumía la línea argumental de su trabajo.

La primera idea que podemos señalar es que la adopción no es una categoría en la que debamos clasificar a las personas aunque sí tiene una característica, y es la situación de abandono que ha vivido la persona adoptada. La vivencia de este abandono puede tener unas consecuencias a lo largo de la vida de las personas y que tienen que ver con la búsqueda de seguridad; “Hay un miedo intrínseco, permanente, que no desaparece”, señalaba Alberto Rodríguez en referencia al miedo al abandono.

A esta característica se suman las propias de la adolescencia, la condición adoptiva y la diferencia. En opinión de Rodríguez, la vivencia de esta última “es la peor porque los chicos y chicas quieren ser como los demás y a veces no pueden porque sus rasgos físicos evidencian `que no son de aquí´”. Por otra parte, en la relación con la familia adoptante se dan unas fases que corresponden con la adaptación (una fase de un año de duración en la que la relación se idealiza), la fase de transferencia y repetición de conflictos (los chicos y chicas tienen que sacar sus problemas todo lo posible, puede durar años) y la fase de regresión y de construcción de las relaciones.


En cuanto a los problemas de convivencia y violencia que pueden producirse, Alberto Rodríguez señalaba que el enfado o la violencia surgen como medio para no manifestar el miedo al abandono y que, precisamente se activan contra las personas a quienes se teme perder. Por otra parte, Rodríguez introducía el concepto de “mecanismo de escisión mental”, un proceso de pensamiento por el que los chavales no tienen una visión intermedia de sus vivencias y por el que consideran que toda persona que pone un límite es considerada como “mala” y los “buenos” son quienes no ponen límite. Por eso el experto propone que en sus relaciones (familia, centro educativo….) haya personas que siempre ejerzan el papel de “bueno” y otras de “malo”; “las soluciones tienen que venir de esta división”.